En un mundo donde la demanda de energía sostenible y eficiente es cada vez mayor, los Sistemas de Baterías para Almacenamiento de Energía (BESS, por sus siglas en inglés) se están posicionando como la solución definitiva. Estos innovadores sistemas no solo están revolucionando la manera en que almacenamos y utilizamos la energía, sino que también están proporcionando una serie de beneficios que tienen el potencial de transformar nuestra vida cotidiana, nuestras empresas y, en última instancia, nuestro planeta.
En este artículo, exploraremos cómo estas tecnologías están cambiando el panorama energético, mejorando la eficiencia y estabilidad de las redes eléctricas, y promoviendo una cultura de sostenibilidad y responsabilidad ambiental.
¿Qué es un Sistema BESS?
Un BESS (Battery Energy Storage System) es un sistema de almacenamiento de energía que usa la capacidad electroquímica de baterías para guardar energía de diferentes fuentes para usarla cuando sea necesario. Este tipo de sistemas puede tener muchas variantes, tanto en la tecnología de las baterías, la fuente de alimentación, el uso dentro del sistema eléctrico y los componentes que va a necesitar. Como es una tecnología que apenas está entrando al mercado mexicano, se suele confundir con la función tradicional de las baterías: las uso para tener carga sin estar conectado a la electricidad.
Si conoces un poco más sobre este tipo de sistemas te darás cuenta que tienen muchas aplicaciones, se pueden configurar para diferentes usos industriales y tienen un gran potencial para ahorros en diferentes cargos de tu factura de CFE.
Generalmente se componen de un banco de baterías, un controlador de carga llamado BMS (battery management system) y un inversor cargador que funciona bidireccionalmente: carga las baterías con la energía que se inyecta al sistema o descarga las baterías para potenciar el sistema.
Los BESS son una parte integral de las tecnologías para la eficiencia energética. Implementar este tipo de soluciones puede traer diferentes beneficios a tu sistema, desde el manejo de cargas hasta una optimización en la compra de energía en período base. Sigue leyendo para descubrir cómo.
Aplicaciones prácticas de un BESS
Los BESS tienen tres aplicaciones principales, cada una con sus beneficios particulares según su aplicación:
Load Shifting (desplazamiento de carga):
Esta aplicación es ideal para sistemas con tarifas horarias (GDMTH), donde el costo de la energía varía a lo largo del día. Un sistema BESS configurado para load shifting carga las baterías durante las horas de menor costo y las descarga durante las horas de mayor costo. De esta manera, la energía almacenada se utiliza en los momentos en que la tarifa es más alta, permitiendo así un ahorro significativo al facturarse a la tarifa más baja. Esta estrategia no solo ofrece grandes beneficios económicos al reducir los cargos por energía, sino que también puede impactar positivamente los cargos por potencia. Además, es aplicable a sistemas eléctricos de cualquier tamaño que operen con tarifas horarias.
Continuidad operativa:
La continuidad operativa es esencial en plantas industriales, especialmente en aquellas que enfrentan cortes recurrentes de electricidad y cuyas maquinarias son sensibles a las fluctuaciones de energía. Aquí es donde los Sistemas de Baterías para Almacenamiento de Energía (BESS) juegan un papel crucial.
Estos sistemas incorporan un controlador avanzado que detecta cualquier interrupción en el suministro eléctrico y activa inmediatamente las baterías para proporcionar la energía necesaria, asegurando que las máquinas nunca se detengan.
Esta solución BESS es particularmente beneficiosa para empresas que utilizan calor en sus procesos, donde el precalentamiento y el inicio de operaciones pueden ser largos y costosos. Con los sistemas BESS, tus máquinas recibirán un suministro constante de energía, eliminando la necesidad de esperar la activación de generadores y evitando problemas durante los apagones. De este modo, se garantiza la continuidad operativa y se maximiza la eficiencia y productividad de la planta, protegiendo tanto el equipo como los procesos productivos de cualquier interrupción energética.
Te puede interesar: Iluminando el futuro: paneles solares y el compromiso ESG
Sistemas Aislados
Aunque las aplicaciones modernas de los Sistemas de Baterías para Almacenamiento de Energía (BESS) son emocionantes, es importante recordar sus usos tradicionales. Los sistemas BESS, cuando se integran con fuentes de energía renovable, pueden alimentar eficientemente una casa o planta industrial ubicada fuera de la zona de cobertura de la CFE.
Al dimensionar adecuadamente los bancos de baterías y las fuentes de energía renovable, se garantiza un suministro constante de energía, independientemente de las variaciones climáticas y de carga. Esta solución es ideal para quienes tienen una casa de vacaciones en un área remota o están construyendo un parque industrial fuera de la red. Con los sistemas BESS, puedes disfrutar de una fuente de energía fiable y continua, asegurando que tus operaciones no se vean interrumpidas por la falta de cobertura eléctrica.
¿Cómo saber si necesito un sistema de baterías para almacenamiento de energía?
Los sistemas BESS son para todos: desde aplicaciones en un residencial para limitar el tiempo que pasas en un corte de energía, hasta todo tipo de usos industriales. Los proyectos exitosos de BESS son aquellos que tienen a tener cargos muy altos por usar energía y potencia en período punta, que sufren de cortes eléctricos de poca duración, o sistemas en donde traer la electricidad de la CFE es inviable por la localización. Además, con ellos se pueden integrar diferentes tecnologías renovables como sistemas de paneles solares o microturbinas eólicas.
¿Por qué elegir los BESS sobre otros sistemas de almacenamiento?
Aunque se conocen otro tipo de sistemas de almacenamiento de energía, ninguno es tan modular y escalable como los BESS. Un tipo muy conocido de almacenamiento energético son las hidroeléctricas, donde el agua (y por tanto la energía) se almacena en el embalse y se convierte en electricidad hasta que pasa por la turbina. Sin embargo, este tipo de sistemas son muy grandes y no se pueden adaptar a una escala industrial menor o a aplicaciones para particulares.
Las plantas termosolares usan otro tipo de almacenamiento en la forma de aceites o sales como materiales de cambio de fase, en los que se agrega energía hasta que el material sufra un cambio físico (como un derretimiento) y a partir de allí se puede usar esa energía como electricidad. Este tipo de materiales son muy costosos y además requieren de toda una infraestructura para que puedan funcionar. Otros sistemas de almacenamiento que puedes ver en tu día a día son los volantes de inercia en el motor de tu carro, sistemas de aire comprimido y por supuesto: las baterías.
¿Qué debo considerar antes de optar por un sistema de baterías para almacenamiento de energía?
Antes de decidir si un Sistema de Baterías para Almacenamiento de Energía (BESS) es la mejor solución para tus necesidades, considera el siguiente checklist:
- ¿Mi sistema eléctrico está bajo tarifa horaria (GDMTH)?
- ¿En mi zona suelen haber cortes de energía durante el período de operación?
- ¿Tengo altos cargos de potencia en mi factura de CFE?
- ¿Me hace falta un sistema de respaldo para la maquinaria de mi empresa?
- ¿Pierdo mucho tiempo de operación en un corte eléctrico?
- ¿Mis máquinas son muy sensibles a los cortes de electricidad?
- ¿Es muy caro traer la energía eléctrica de la CFE para alimentar mi sistema?
Si respondiste “sí” a más de una de estas preguntas, un sistema BESS probablemente sea la solución ideal para ti. Contáctanos para una evaluación personalizada y descubre cómo podemos ayudarte a optimizar tu consumo energético y asegurar la continuidad de tus operaciones.
* Fecha de última actualización: Martes 25 de junio 2024, CDMX, México